Para el practicante de Karate-do Tradicional:
Practicar Karate no
consiste únicamente en portar un uniforme blanco y entrar en un Dojo
(sala de entrenamiento), para aprender unas cuantas técnicas de defensa y
ataque. El estudio del arte marcial también nos enseña orden ético, que
lleva al practicante a enriquecerse espiritualmente y a profundizar en
su capacidad de respetar a los demás.
Por eso mismo, es
importante que un Karateka se compenetre con los significados
aparentemente extraños, “ya que no forman parte de nuestra vida
cotidiana de occidentales”, como el saludo en el inicio y final de los
entrenamientos o de determinadas fases de los mismos. Se trata de
actitudes destinadas a manifestar y consolidar el respeto por los
instructores presentes en el Dojo, por los compañeros con los que vamos a
entrenar o con los que acabamos de entrenar, además de mostrar respeto
por los maestros que no estando presentes, son de hecho orientadores de
nuestra práctica y los inspiradores del modelo que seguimos.
También existen otros
aspectos más del comportamiento del Karateka que deben ser
conscientemente asumidos, como la puntualidad y la constancia a los
entrenos. En verdad, el Karateka que en este tema no sea disciplinado,
simplemente será un mero practicante, pues no solo perjudica su
aprendizaje y su progreso, si no también perjudica y daña el trabajo de
su instructor y de sus compañeros.
Con todo, ser puntal y
constante no son actitudes suficientes para definir o ayudar a formar a
un buen practicante; son igualmente importantes factores como la
higiene personal y la presentación limpia y cuidada de su Karategui en
todas las circunstancias. Más importante que el color del cinto que se
usa, es una apariencia saludable y respetuosa de sí mismo, como la que
la higiene personal inspira.
Practicar Karate
Shotokan, según las normas y el espíritu de ISKA, significa no solo
adquirir una mayor perfección técnica, sino también como saber respetar
la integridad física de cada practicante, tanto en las fases más duras
de la práctica del Kumite en los entrenamientos como en la competición.
Una preocupación a tener siempre presente, será la de no agredir o herir
voluntariamente al compañero de entreno o al adversario de un combate
(que en muchas ocasiones es una misma persona), para esto se exige al
practicante que no solo posea un perfecto control de sus movimientos, de
su agresividad o fuerza física, si no también una gran disciplina en
aquellas “pequeñas cosas” que puedan ir contra el bien estar físico de
cada practicante de Karate, como es tener el máximo cuidado manteniendo
las uñas cortadas de las manos y pies, y nunca usar objetos, que en el
día a día son perfectamente inofensivos pero que, en una situación de
contacto físico pueden transformarse en una fuente de lesiones, como los
relojes, pulseras, anillos, pendientes, etc…… Su propia higiene,
etiqueta y presentación contribuirán también a aumentar la seguridad
física y el bienestar.
También es cierto que
un Karateka no es un monje, y es bien verdad que todo ciudadano tiene el
derecho a la legítima defensa si es atacado y no menos verdad que el
practicante de Artes Marciales posee o está en el camino de conseguir
conocimientos de técnicas de defensa y ataque que se tornan
potencialmente peligrosas para un antagonista no iniciado en Artes
Marciales. Por tal motivo, es parte de la disciplina de todo Karateka
“no olvidar” lo aprendido en el preciso momento en el que abandona el
Dojo donde acaba de entrenar y nunca hacer uso de las técnicas
aprendidas en los entrenos, al no ser para defender la integridad física
propia o de los suyos en situaciones de extremo peligro y donde no se
encuentre otra opción menos violenta. Tal vez exija más disciplina el
no agredir y no responder, que el exhibir su “Arte” y caer en los
comportamientos marginales. Por esto también será bien reconocido quien
es un buen practicante fuera y dentro del Dojo.
© ISKA Honbu Dojo
Ceremonial de inicio y fin de una clase
SEIZA: Arrodillarse
MOKUSO: Meditar
MOKUSO YAME: Fin de la meditación
EI JO SHIN KORE KARATE DO NARI: Empeñarse espiritualmente en esta forma de Karate
NICHINICHI NO KOKORO: Todos los días con el corazón
OKATARU BEKARAZU: Aprendamos disciplinadamente
SHOMEN NI REI: Saludar a la esencia infinita
SENSEI NI REI: Saludar al profesor
KIRITSU: Levantarse
SEIZA: Arrodillarse
MOKUSO: Meditar
MOKUSO YAME: Fin de la meditación
EI JO SHIN KORE KARATE DO NARI: Empeñarse espiritualmente en esta forma de Karate
NICHINICHI NO KOKORO: Todos los días con el corazón
OKATARU BEKARAZU: Aprendamos disciplinadamente
SHOMEN NI REI: Saludar a la esencia infinita
SENSEI NI REI: Saludar al profesor
KIRITSU: Levantarse
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